Madrid | 27 de mayo de 2019
El pasado viernes nos visitaron, desde la Dirección General de Políticas de Discapacidad, perteneciente al Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, un grupo de nueve personas para contarnos su actividad dentro del ministerio y cómo la realizan, además de otros detalles sobre temas más livianos y personales, no por ello menos interesantes.
Después de una intensa visita por el Centro Integral de Discapacidad de Envera, el paso por Radio Terrícola fue el momento más participativo y divertido de la agenda matutina, acaparando la atención de los entusiastas reporteros que alegremente ansiaban tan grato encuentro.
Frente a nuestros micrófonos se sentó un numeroso equipo de entrevistadores pertenecientes al Centro Ocupacional y del otro lado dos representantes de la nutrida comitiva ministerial: Laura Diego y Begoña González.
Lo primero que nos llamó la atención es que eran 9 mujeres desprovistas de cualquier acompañante varón, grato acontecimiento insólito en nuestra radio hasta el momento. Ellas sonrientes, y con inmejorable disposición, iban a ser parte del programa que los viernes, donde trabajamos temas sobre el ocio, las aficiones y los acontecimientos culturales que se desarrollan en toda la zona norte de Madrid, es «El Finde».
Para ellas, lo que no se esperaban era la batería de algunas preguntas sesudas, de implicación reflexiva y no menos transcendental. Otras leves, impregnadas de pura espontaneidad.
Nuestro primer encuentro se produjo hace unas semanas en RTVE, en Prado del Rey, cuando nos proyectaron el primer programa «De Seda y Hierro», donde Antonio Martín, el famoso Michael, comandante de terrevuelos y dotado de tantas aficiones más, era uno de los protagonistas de su primera entrega. Ahí ya apalabramos esta interesantísima visita que felizmente huella dejará.
En los primeros minutos del programa, para ir conociéndonos un poquito mejor, Laura y Begoña nos contaron en qué departamentos trabajan y cómo hacen posible, con su esfuerzo y dedicación, las mejoras en la calidad de vida de las personas con discapacidad intelectual. Así supimos existe un área internacional, donde comparten con otros países experiencias y políticas de desarrollo, también, un área de normativas, que como su nombre indica, trabajan sobre las normativas en proyectos, en propuestas del Congreso o del Senado, en recursos de otros ministerios… en fin, un trajín importante que seguramente las exige una implicación considerable.
Nos contestaron a preguntas personales, unas más difíciles, otras más llevaderas, pero siempre con una simpatía y buen rollo que ya empezamos a sentir como algo propio en todos nuestros invitados radiofónicos.
Se establece una conexión íntima que echamos de menos fuera de estas instalaciones, y no sabemos muy bine por qué.
¿Por qué nos alejamos tanto del otro cuando nos salimos de este contexto?, ¿por qué empalizamos tanto y nos volcamos en procurar instantes tan emotivos, cuando nuestra realidad exterior es a veces tan hostil?, ¿es posible que el contacto con la diversidad, con los que se muestran tal cual, con los que son verdad en cada gesto o reacción, nos recuerdan la esencia de todo lo bueno que llevamos dentro y que, por diferentes razones, nos induce a cerrarnos inconscientes, como el bicho bola, ante el más leve quiebro? Es un misterio y también una pena.
José Antonio Quintero, nuestro querido presidente, agradeció efusivamente a todas estas mujeres las horas que nos dedicaron aquella calurosa mañana y el trabajo que con tanta pasión y energía nos brindan día a día por lograr un mundo mejor y más justo.
¡¡¡Tresmil hurras por ellas!!!
