Madrid | 4 de junio de 2020
La solidaridad ha sido el eje del penúltimo programa anterior a la vuelta a los estudios. La emisión de hoy se ha nutrido de voluntariado, de donación de alimentos, de vuelos cargados de ayuda, de apoyo psicológico y, en definitiva, de colaboración en tiempos pandémicos. Sin duda, uno de los programas más conmovedores de Radio Terrícola… si es que puede medirse la emoción.
CRISTINA SÁNCHEZ, coordinadora del Servicio de Atención Temprana de Envera, ya de reapertura, ha valorado que los niños hayan seguido el protocolo «porque para ellos estar ahí es un juego y lo han echado de menos». De primera mano nos ha contado que han crecido, están más guapos, más tranquilos y llegan con nuevas fuerzas. Pero habrá que esperar para inaugurar el parque infantil, que ha quedado precioso, totalmente accesible y ligado a la historia del viaje. Cristina nos advierte que, aunque se cierra el Servicio de Atención Psicológica Covid19, puesto en marcha por Envera para dar apoyo a trabajadores, socios y voluntarios de nuestra organización, aún serán necesarios sus consejos tras el confinamiento y que siempre habrá alguien para tender la mano a quien lo necesite.
VÍCTOR ALEGRE, voluntario digital de Iberia en Envera, ha hecho honor a su apellido trayendo positividad al programa. En plena Operación Kilo, ha ido dando el micrófono a compañeros de Iberia, como Alex, un copiloto que ha viajado a Shangai para traer material sanitario: «no estamos acostumbrados a llevar carga y hemos visto mucha cooperación. Ha sido un auténtico placer, una experiencia fantástica». El micrófono ha pasado a Cristina, sobrecargo, enfrascada en el empaquetado y clasificación de alimentos solidarios que irán desde Monte Carmelo al Banco de Alimentos, centralizado en el Colegio de San Fernando, en Colmenar. De una Cristina a otra tocaya, casada con un comandante de nuestra empresa madre, que ha contado la importancia de colaborar con productos no perecederos porque «cualquier cosa que aportes es algo que otro se lleva a la boca». Quien quiera colaborar puede acudir hasta mañana a las 12 a la calle Monasterio de las Batuecas, nº 18. Cerró la conexión Víctor, voluntario de pro, para rematar diciendo que ha visto cuatro veces el corto de Michael y cada día le gusta más: «los increíbles sois vosotros» nos ha dicho. Aquí le esperamos con los brazos abiertos.
MILA BENITO, directora de Comunicación y Marketing del Banco de Alimentos de Madrid, ha traído datos de la crisis, «estructural y no coyuntural», refiriendo que el Banco de Alimentos asiste a 537 entidades benéficas, entre ellas a todas las ONG de la Comunidad de Madrid. «El confinamiento ha hecho aflorar una grandísima bolsa de gente que trabajaba en la economía sumergida» y por eso ofrecen nada menos que once mil menús diarios con ayuda de entidades, del chef José Andrés, de la UME, la Guardia Real y muchos otros colectivos. Acostumbrados a trabajar en situaciones de emergencia, «porque el hambre no espera», comenta que se han organizado para que la ayuda llegue a todos sin riesgo de fraude, que en estas circunstancias siempre lo hay. De ahí que para mejor colaborar se visite la página https://bamadrid.org/ donde se indican las dos posibilidades de ayuda: la económica, necesaria para poner en marcha la maquinaria, y la donación de alimentos. Para empresas que deseen participar, la dirección es okempresas@bamadrid.org. Un aplauso gigante le ha despedido.
ANA GALÁN, poeta participante en Intraversos, ha intervenido un poco perjudicada por su caída de bici, justo el primer día que se acercaba al Retiro. Nos ha contado que lleva 70 días difundiendo en Facebook «un abrazo cada noche» para hacer más soportable el confinamiento. Luego ha hablado de los recitales de poesía, «toda una cultura», que quiere recuperar en directo porque no tiene sentido si luego no lo comentas con los compañeros. Nos ha leído el poema «Un solo abrazo» y ha revelado que tiene un libro durmiendo, dedicado a las partes del cuerpo humano, pero será en directo, muy pronto, cuando nos desvele más secretos. Porque vendrá a vernos… aunque sea en coche.
JOSE MARÍA LANZA, NANO, músico, compositor y con un sonido surfero, transparente y lleno de matices (según definición de su gran amigo Jesús de Frutos), ha intervenido desde Toledo, donde ha vivido el confinamiento con vistas privilegiadas. Nos ha contado que, después de crecer entre ocho hermanos viendo llegar vinilos que le cautivaban, no le ha quedado otra que apasionarse por la música y sobre todo aquella de entonces que se hacía con una guitarra, un micro y un amplificador: «los sonidos eran más puros y más espontáneos». Opinión que no le impide ahora tener una «cueva» de grabación y medios técnicos más que necesarios. Le oiremos en directísimo cuando venga a nuestros estudios, que lo ha prometido, conste en acta. Gran músico y mejor persona, que, cómo no, se ha llevado el aplauso de rigor.
Ya en la recta final del programa, hoy más que ayer, nos despedimos con alegría temprana oteando en el horizonte las siluetas de los auténticos protagonistas de Radio Terrícola frente a los micrófonos. Ésa ha sido la imagen que ha inspirado la continuidad de nuestra radio en tiempos difíciles y también el motivo de orgullo por lo que hacemos.
Mañana, más. Nos espera el último programa muy especial “Juntos somos más fuertes”, así que, como dice nuestro comandante de terrevuelos, Antonio Martín “Michael”, nos escuchamos.